Un símbolo que generalmente se puede asociar con más de una cosa que solo la navidad, son las estrellas. Estos astros, a menudo, son catalogados por muchas culturas como un símbolo de guía, de esperanza y de luz que cura la incertidumbre en épocas de incertidumbre y de dudosa calidad moral.
En el caso de la navidad, las estrellas, parecieran multiplicarse por cientos de miles en la constelación estelar y por ende, suelen ser adornadas con más brillo que nunca, cuando deseamos que formen parte de nuestra decoración navideña.
Una estrella de navidad, en general, debe ser el elemento que más resalte o cuando menos, que más brille dentro de nuestro catálogo de adornos, y es que estas sencillas pero estimulantes figuras, a menudo, simbolizan el marco culmine de nuestra obra maestra.
Difícilmente encontraremos un árbol de navidad, que no tenga en la cúspide de su tronco a una estrella refulgente que infunde luz a toda la casa. Pueden ser desde aquellas con formas simples de cinco extremidades, hasta estrellas de diversos motivos con múltiples aristas y tonalidades diferentes de plata, oro y amarillo.
Sin embargo, si no deseamos comprarlas, sino hacer nuestro propio equipo de astros estelares, deberemos tener en cuenta el propósito de nuestra creación, antes de ponernos manos a la obra. Pueden fabricarse simplemente con cartón reciclado que podemos conseguir de cajas que ya no se estén utilizando, como cereales o depósitos de algún utensilio que ha encontrado un mejor lugar dentro de nuestra cocina.
Recortaremos la forma de la estrella, directamente de la cara de la caja y luego podremos proceder a pintarla con el tono de oro o plata que más nos agrade. Una vez que finalicemos, la idea de nuestra estrella, es que brille, y la brillantina será la cereza sobre el pastel perfecta para culminar nuestra obra.
Las estrellas son un faro de luz y de esperanza que nos guían en nuestros mejores y peores momentos. Justo es, que tengan un espacio importante en nuestra casa durante las navidades, y sobre todo, en nuestras vidas. Siempre han sido y serán, un acompañante perfecto durante las épocas decembrinas.